Las represas cruciales para el abastecimiento de agua en Arequipa se encuentran casi vacías de su capacidad, planteando una seria amenaza para la seguridad hídrica de la ciudad.
Las represas de Arequipa, que abastecen a la ciudad, están al menos del 50% de su capacidad, lo que no garantiza la seguridad hídrica y pone en riesgo el abastecimiento de agua para la población. Si no hay precipitaciones en las zonas donde se encuentran las represas (El Pañe, Dique los Españoles, Pillones, El Frayle, Bamputañe, Chalhuanca y Aguada Blanca) las autoridades se verán obligadas a restringir el uso de agua a partir de marzo de 2024.
Estado actual de las represas
Según un informe de la Autoridad Autónoma de Majes (AUTODEMA) las represas se encuentran en siguiente estado:
- La represa El Pañe, con una capacidad máxima de 99.60 millones de m3, actualmente alberga 53.24 millones de m3, lo que representa el 53.5% de su capacidad total.
- El dique Los Españoles tiene una capacidad máxima de 9.09 millones de m3, pero actualmente contiene 3.37 millones de m3, alcanzando el 37.1% de su capacidad total.
- La Represa Pillones posee una capacidad máxima de 78.5 millones de m3, la represa Pillones almacena 26.86 millones de m3, lo que equivale al 34.2% de su capacidad total.
- El Frayle cuenta con una capacidad máxima de 127.24 millones de m3, de los cuales 60.34 millones de m3 están actualmente almacenados, representando el 47.4% de su capacidad.
- Bamputañe tiene una capacidad máxima de 40.00 millones de m3, pero actualmente alberga 15.01 millones de m3, alcanzando el 37.5% de su capacidad total.. Chalhuanca tiene una capacidad máxima de 25 millones de m3, con 21.97 millones de m3 actualmente almacenados, lo que representa el 87.9% de su capacidad total.
- La represa de Aguada Blanca tiene una capacidad máxima de 30.43 millones de m3. En la actualidad, almacena 13.75 millones de m3, alcanzando el 45.1% de su capacidad total.
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Repuesta de AUTODEMA
Por parte de AUTODEMA se reconoce que hubo un manejo deficiente en años pasados. Miguel Enrique Fernández Mares, gerente de Recursos Hídricos de esta entidad, expresó su preocupación sobre el cuidado deficiente del recurso hídrico durante el año pasado. Confirmó que no se tomaron las previsiones necesarias, incluyendo el mantenimiento y reserva del volumen adecuado. Esta falta de precaución llevó a que los niveles de agua descendieran por debajo de los 30 millones de Hm3 hacia el final del 2022. Fernández Mares subrayó que este estado de volumen insuficiente no solo afecta el suministro actual, sino que también conduce a un aumento significativo en la sedimentación de las represas, exacerbando los desafíos en la gestión del agua para la región.
Opiniones de expertos
De acuerdo con Ronald Fernández Bravo, director de la Autoridad Administrativa del Agua Caplina Ocoña, es posible que las siguiente generaciones no tengan acceso óptimo al recurso hídrico y es necesario una nueva gran represa para antes de 2050. El experto señaló la necesidad urgente de construir varias represas en la zona oriental y norte de la ciudad para hacer frente a la creciente demanda de agua de los nuevos habitantes de áreas en expansión como Cono Norte y La Joya.
Sin embargo, Jhon Machaca Cennty, jefe de la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca en Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SERNANP), declaró en que si bien Arequipa necesita más agua, las grandes represas no son la solución. Propuso que los represamientos dirigidos —como cochas y espejos de agua—, son necesarios para mejorar la disponibilidad hídrica. Además Machaca enfatizó la importancia de conservar la Reserva de Salinas Y Aguada Blanca, ya que de esta sale el agua que consumen más de un millón de arequipeños y genera el 92% de la energía eléctrica de la región.
Ejemplos a seguir
Según Max Carbajal, Director General de Políticas y Regulación en Construcción y Saneamiento del Ministerio de Vivienda, las presas verdes o qochas cumplen un rol importante en la lucha contra la crisis hídrica por su bajo impacto ambiental y la cantidad de agua que pueden acumular. Los muchos proyectos de qochas y embalses ejecutados por Sedapar en San Juan de Tarucani muestran la ruta a seguir en la región.
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